Nuestras visitas al casco histórico de Corella comienzan en San Benito (Museo Arrese de Arte Sacro) o antiguo Convento de la Madres Benedictinas, explicando la historia del convento y su arquitectura. La gran mayoría de edificios, Palacios, Palacetes, Casas Señoriales de Corella pertenecen al Barroco, quedan pocos anteriores, el Palacio de Corella, plateresco y la parte trasera de San Miguel, románico tardío. En dicho recorrido visitamos las casas típicas del barroco, hablamos de las familias que las ocuparon, contando anécdotas y cosas que ocurrieron en los edificios, después de todo contar las historias de sus propietarios es como recordar la forma de vida que acontecía, de como estaba organizada y de sus hazañas.

Al visitar algunos edificios de nuestra historia nos remontamos a épocas anteriores, cuando Corella pertenecía al Reino de Navarra y su importancia al ser un enclave fronterizo, explicando las circunstancias de conexión entre las distintas etapas para entender su grandeza y la de sus gentes.

Como ciudad fortaleza, frontera con Castilla, otra de sus características es la gran red de túneles que conectaban toda la orbe, donde en épocas de incertidumbre permitían a los soldados llegar a los puestos sin ser abatidos y a sus ciudadanos poder huir sin ser masacrados, esta gran trama de pasadizos es algo habitual en sitios donde las guerras son constantes, recorridos por personas a caballo o carretas os podéis hacer una idea de sus dimensiones, estos años de atrás antes de su muerte, cuando el Sr. Escudero venía a Corella, ciudad que tanto amaba, permitió visitar los de su propiedad porque estaban bien acondicionados, como bien cultural y patrimonio de Corella.